Imaginar,soñar... aveces resulta cosas insignificantes para algunos, mientras para otros casi lo es Todo
miércoles, 28 de diciembre de 2011
Ultimo 21
viernes, 25 de noviembre de 2011
Esta bien
Tomo fuertemente su almohada como si quisiera descoserla con sus propias manos, no sabia que hacia, se mojaba algunos mechones de su cabello con lagrimas que caían lentamente por sus mejillas. Hace unos segundos estaba sola, cantando en la fría habitación pero de la nada se tumbo en la cama a llorar como si la hubiesen regañado o golpeado. Y allí se hallaba pensando una vez mas “que hago?” Recordaba la letra de la canción y sonría mirando hacia el suelo “porque no puedo estar sin ti”, seguía recordando y pensando, preguntándose porque EL ya no estaba, porque ya no le interesaba volver.
-Quizá, esta historia no es tan mala, quizá si te extraña.
Pero sabia en el fondo que el no lo hacia, era pasado, un pasado que nunca paso.
- Nunca paso- se repetía-
Es injusto, eso era. Para ella debía ser totalmente injusto estar llorando por un tipo un viernes por la tarde, llorando por un tipo que era feliz con otra,un tipo que dejo de ver hace 6 meses, que se había ido sin decir porque, a donde, sin despedirse, sin siquiera conocerse.
-No lo conoces- siguió riendo mientras sus ojos seguían derramando lagrimas.-Es por eso que es tan perfecto.
Apretó sus ojos como si hacerlo fuertemente acabaría con todo lo que le provocaba llorar, se seco las lágrimas.
-Recuerda, EL esta bien-Seguía siendo injusto “pero esta bien”.
viernes, 2 de septiembre de 2011
Esta cercania que me aleja mas de ti.
No sabes como me duele tenerte tan cerca, como saber que lees mis pensamientos, que me sigues en todas las redes sociales y que eso me hace sentirte cerca porque en mi cabeza quiere decir que somos todo y a la vez se que somos nada.
jueves, 1 de septiembre de 2011
Lo que te diria
martes, 30 de agosto de 2011
Has perdido algo sin tenerlo?
Gracias por leerme!
viernes, 13 de mayo de 2011
La bipolar Samantha.
Cansada de otra semana más llena de completa rutina, Samantha se dirigía a la coordinación de la escuela, a pedir, sin ánimo alguno, el pase de llegada tarde, que se había vuelto común en ella desde hace días atrás. Agitándose el largo cabello y sin tener cuidado ni percatarse de quien estaba a su alrededor, caminaba firmemente hacia el pequeño recinto, se decía a si misma ‘hagamos lo que vinimos a hacer’.
Sin siquiera decir buenos días entro a la habitación, no había nadie, todas las aulas estaban cerradas, quiso esperar sin buscar, revisar ni llamar a nadie.
-Ehm,A quien buscabas?- Dijo una conocida voz
-No, esta bien.. yo, esto … ya entro- Expreso impresionada.
Era el. La razón de sus rabietas, rebeldías y aburrimientos…era el hecho de no conocerlo, de creer tener algo y tener nada.
Inmediatamente pareció volver a ser la pequeña niña obediente de antes, esa que huía de los problemas y realidades, solo salio de la habitación.
Corrió por el pasillo sin mirar atrás, escucho un pequeño “espera” y sintió la mirada del el como se clavaba en su espalda, que rápidamente se alejaba.
Esa fue la razón de su felicidad, durante toda la semana… El hecho de poder haber escuchado su voz, el hecho de saber que se dirigía solo a ella y a nadie mas, el simple hecho de querer que se “quedara” había ocasionado en la pequeña un extraño buen humor y una felicidad inmensa y notoria. La dulce (y cobarde) Samantha, había regresado.